En un evento que ha conmocionado a toda la comunidad de Gamarra, Cesar, una funcionaria de la Registraduría se convirtió en víctima de un trágico incidente durante su servicio en la sede electoral. La funcionaria, Duperly Arévalo Carrascal, quedó atrapada en un baño en llamas, y su vida fue arrebatada en un acto de violencia sin sentido. 

El incidente tuvo lugar el este 28 de octubre, un día antes de las elecciones locales, un evento crucial para la democracia de la región. La funcionaria se encontraba cumpliendo sus deberes en la Registraduría, una institución esencial para garantizar la transparencia y legitimidad de los procesos electorales. 

Las circunstancias exactas que llevaron al incendio y la muerte de la funcionaria fue por los disturbios que la misma comunidad organizó. Las autoridades locales, en colaboración con la policía y otros organismos pertinentes, están trabajando arduamente para esclarecer los detalles del incidente y llevar a los responsables ante la justicia. 

La comunidad de Gamarra, junto con todo el país, ha reaccionado con horror y tristeza ante esta noticia. La violencia sin sentido en un evento tan importante para la vida democrática de la región es profundamente desgarradora y desconcertante. Las elecciones locales son momentos en los que los ciudadanos ejercen su derecho al voto y toman decisiones que afectarán su comunidad. Un acto tan violento socava la confianza en el proceso y amenaza la estabilidad de la sociedad.

“Dolor se siente en lo profundo del alma al conocer que una funcionaria de la Registraduría de Gamarra (César) ha sido vilmente asesinada en los hechos que han ocurrido en ese lugar. Mi solidaridad con la familia de Duperly Arévalo Carrascal. ¡No hay derecho!”, dijo el magistrado del Consejo Nacional Electoral, César Lorduy, reaccionó lamentando lo ocurrido. 

Hasta el momento hay cuatro uniformados de la Policía heridos, la comunidad de Gamarra, Cesar, llora la pérdida de una valiosa funcionaria de la Registraduría y espera que se haga justicia en su memoria.