En un movimiento que apunta hacia una mayor equidad de género en el sistema de pensiones, se ha presentado una significativa ponencia en el marco de la reforma pensional en Colombia. Este documento de 94 artículos trae consigo cambios significativos, especialmente para las mujeres trabajadoras. 

Una de las medidas clave es la reducción en el número de semanas de cotización requeridas para que las mujeres sean elegibles para la pensión. Este ajuste reconoce las desigualdades históricas que las mujeres enfrentan en el mercado laboral y ofrece un paso significativo hacia la igualdad de oportunidades de retiro. 

“El umbral sigue en los tres salarios mínimos iría para col pensiones, los que ganemos de los que ganen de 1 a 3 salarios mínimos van al cole pensiones y el resto a las Afpb, pero el régimen de transición sería también el mismo 900 semanas para los hombres 750 para las mujeres.” 

Es importante destacar que esta reforma no solo se enfoca en el aspecto de las semanas de cotización, sino que también mantiene la estructura del sistema de pensiones colombiano. Los pilares solidarios, semi-contributivo, contributivo y de ahorro individual seguirán siendo parte integral del sistema, lo que proporciona una variedad de opciones y flexibilidad para los ciudadanos en su preparación para la jubilación.

“Para que las mujeres podamos, solo tener esa proposición positiva de las mil semanas. Esto sería de manera progresiva, no va a ser de tajo, sino que se hace de manera progresiva hasta el 2036.” 

Este enfoque equitativo no solo beneficia a las mujeres que han enfrentado desafíos particulares en el ámbito laboral, sino que también representa un paso esencial hacia un sistema de pensiones más justo y comprensivo para todos los ciudadanos colombianos.