El Deportivo Cali, uno de los clubes de fútbol más emblemáticos de Colombia, enfrenta una profunda crisis deportiva e institucional que ha llevado a jugadores, directivos y cuerpo técnico a denunciar amenazas de muerte. Esta situación lamentable ha generado conmoción en el ámbito deportivo y ha resaltado los desafíos que enfrentan los equipos en medio de dificultades internas. 

El 'azucarero' inició el año en el borde de la cornisa con los puestos de descenso a segunda división para el 2025. Necesita sumar la mayor cantidad de puntos posibles para empezar a salvarse y ante el comienzo tambaleante de temporada, una parte de las barras bravas del equipo lanzaron amenazas de muerte a jugadores y en especial a Jaime De La Pava. 

Los mensajes violentos hacia De La Pava y algunos jugadores del Cali se intensificaron luego de que en grupos de hinchas en redes sociales se hicieran públicos sus respectivos números telefónicos. Quienes hicieron esto tuvieron la intención de 'presionar' con amenazas al plantel para mejorar los resultados y salieran de la zona roja de la tabla del descenso. Como si eso ayudara... 

"Es muy triste y al mismo tiempo preocupante lo que está sucediendo, no podemos llegar a esta situación. Lo del profe Jaime no es cierto, solo que está preocupado como todos nosotros por todos esos comentarios. Las autoridades ya están al tanto de lo que se está presentando", declaró al respecto Guido Jaramillo, presidente del Deportivo Cali. 

La revelación de las amenazas ha generado reacciones de indignación y solidaridad tanto dentro como fuera del ámbito deportivo. Jugadores de otros equipos, figuras destacadas del fútbol colombiano y la sociedad en general han expresado su repudio a este tipo de acciones, resaltando la necesidad de abordar estos problemas de manera urgente. 

Ante la gravedad de la situación, el Deportivo Cali y sus integrantes han realizado un llamado a las autoridades competentes para que investiguen y brinden las garantías necesarias de seguridad. Además, se espera que se tomen medidas para prevenir futuros incidentes similares y se refuerce la protección a los jugadores, directivos y demás miembros del club.